EP: Sonido de Ultramar – Islas

Música contemplativa para almas melancólicas, según dicen.

 

Y tienen, razón. Las redes sociales del proyecto Islas tienen la frase introductoria en su descripción y me parece la mejor manera de resumir en cinco palabras su propuesta musical. Islas es el proyecto de Ricardo Castillo y viene desde Mérida, Yucatán. Recientemente se estrenó el EP llamado Sonido de Ultramar y si aún no lo han topado, necesitan hacerlo pronto.

El material es muy conciso y directo. Cada canción es un espacio diferente pero todo está unido con una misma estética al igual que con una misma esencia. Por lo mismo, todo el sonido está muy bien amarrado pero esto no quiere decir que se vuelva monótono o predecible. Al contrario, las rolas parecen muy sencillas pero cuentan con un gran dinamismo y, a pesar de que llevan un tempo medio lento, nunca son aburridas ni demasiado lentas.

Se tiene que reconocer que este es un material para admirar, o contemplar, a la vez se disfruta muy fácil y fluye con cualquier estado de ánimo. Sin embargo, hay un nivel, creo yo, muy profundo. El mensaje es directo y la producción rifa tanto que cada textura se mezcla para formar algo extremadamente uniforme, sin llegar a aplanarse. Es como un río de sonidos que impacta como uno solo pero al prestar un poco de atención se reconoce, prácticamente, cada gota que forma esta sonoridad. Hay tantos elementos que se comunican entre sí que todo parece uno mismo.

Las rolas llevan una composición admirable y las melodías vocales se impregnan en seguida, por lo que los coros los puedes empezar a cantar desde la primera vez que escuchas la canción. Todo el material recuerda a un dream pop que no le tira tanto al lo-fi y también se sienten algunos elementos progresivos. En general creo que es un material espiritual en el que se conectan emociones y sensaciones físicas, las guitarras acústicas presentes a lo largo de todo el EP son la guía del universo sonoro de Islas. Hay una gran experimentación y arreglos enormes que hacen que suene gigante y espacioso pero todo surge, o regresa, a la guitarra acústica. Siempre hay movimiento, por lo mismo, y cada rola es un paseo.

Lo único malo, pero sin duda no un error, es la duración del material. Es demasiado corto, incluso para un Ep, pero esto también provoca ganas de más. En lo personal, después de escuchar por primera vez el Sonido de Ultramar tuve que repetirlo enseguida. Cada rola tiene su lugar en el material y todas son dignas de sencillo, en sí el EP es un gran sencillo, puras canciones potentes encontramos aquí. No podría decir alguna favorita porque cada una tiene lo suyo así que puedo mencionar algo breve de cada una. Sin Ti es una gran introducción para la atmósfera de Islas, en Japón No Es Una Isla se vuelve muy refrescante el toque femenino de Cocó Cecé, por otro lado Cicatrices brilla mucho por la producción y los arreglos, en Sin Amor resalta mucho la voz y me agrada que sea lo que guíe todo y por último Lejos contiene un universo inexplicable que te envuelve y te suelta aunque quisieras quedarte más tiempo.