LP: Raíz – We Are The Grand

El tercer material discográfico de We Are The Grand es, sin duda, uno de los mejores lanzamientos del año.

 

La banda chilena nos entrega Raíz, su tercer larga duración, y nos regala una verdadera joya. Su más reciente lanzamiento está lleno de energía, ritmos variados y muchas emociones. Uno de los aciertos más grandes de este álbum es que verdaderamente cumple su función de álbum porque está muy bien armado y es consistente a lo largo de todas las rolas. Se siente una unidad durante los casi cincuenta minutos de duración y no te suelta desde que comienza. Aunque hoy en día es difícil, y hasta raro, escuchar discos de inicio a fin eso es lo que deberíamos estar haciendo, si Raíz lo escuchas a partes te estás perdiendo de algo muy importante de esta obra.

Desde el inicio comienza un viaje pero sientes que ya vas tarde, a dónde sea que vayas, porque te agarra por sorpresa una batería movidona y te vas adaptando a medida que se incorporan los demás instrumentos. Es una buena introducción y la rola (Vientos) es bastante memorable pero siento que lo que te muestra que aquí hay algo especial es cuando empieza a sonar Paraíso. El segundo track que lleva la colaboración con Fármacos. Los We Are The Grand logran mezclar muy bien texturas y sonidos que al final arman una unidad que se siente sencilla y directa pero sólo porque estos detallitos están muy bien diluidos y justamente eso nos topamos con Paraíso, que esta llena de melodías suaves y memorables.

Avanzamos por unos entornos interesantes con Caen Las Hojas y Mientes que te hacen corroborar que estás ante una dosis de buena música pero con Lo Que Pudo Ser llegamos uno de los muchos puntos altos que tiene Raíz. Tiene una instrumentación que te convence sin esforzarse en atraparte porque sabe que tú vas a llegar por tu cuenta y te dan ganas de quedarte más de esos tres minutos con treinta y tres segundos. Creo que varias rolas del álbum tienen mucho potencial pero hay algunas que necesitan de cierto nivel de atención en cambio con Lo Que Pudo Ser no necesitas razonar nada y aunque no te sepas la letra ya quieres estar cantando semejante pieza. También lleva uno de los coros más directos y sencillos pero, a la vez, de los más contundentes y memorables.

En este álbum todo se siente en su lugar y ni siquiera te preguntas si no lo está, el sonido en general está muy bien cuidado y nunca hay conflictos entre la instrumentación y la voz o entre el ensamble. Caminas por estas rolas y sientes que no te mueves mucho porque se siente una conexión entre cada una pero la verdad es que Raíz ya nos ha traído de arriba para abajo. A veces meten una mezcla de arreglos interesantes y luego se quedan con una guitarra acústica nada más. El material es una experiencia en extremo dinámica pero también lo son las rolas por sí solas como lo vemos en Luna y Ecos que se mueven por todos lados.

Una vez inmerso en el viaje de Raíz te das cuenta que pasan las rolas pero te das cuenta que no pasan las horas. Es que cada canción tiene lo suyo y no se siente alguna sobrante, tampoco existen momentos sonoros que te saquen de órbita y te cambien la experiencia pero es cuando llega la title track que de alguna manera sabes que estás ante el cierre y sabes que el tiempo sí se mantuvo corriendo. La canción Raíz es un perfecto cierre para todo lo que construyeron los chilenos. Logra explotar y emocionar de una manera que seguramente ya habías sentido en momentos anteriores del disco. Pero esta rola usa muy bien ese dinamismo que ha existido en toda la entrega y nada más cierra el álbum porque ya no le sigue otra canción pero de cierta manera se siente como una introducción a algo más. Te deja con esa sensación, chance, porque te dan ganas de escuchar todo el álbum otra vez.

Este material discográfico es de esos que no piensas en si tiene fallas porque todo es muy sincero. Las letras dejan sus mensajes impregnados en ti y la instrumentación te recorre el cuerpo en todo momento. La verdad es que podría entrar más a detalle en eso pero le quitaría cierta magia a toda la experiencia. We Are The Grand maduró bastante en un sonido que ya les es familiar pero de alguna manera lo siguen haciendo crecer y nada más podemos esperar que estos muchachos sigan haciendo música. La única conclusión posible para este texto es repetir el mensaje de la introducción: El tercer material discográfico de We Are The Grand es, sin duda, uno de los mejores lanzamientos del año.